(Grandes) frases de gente (grande)

(Grandes) frases de gente (grande)

- La mayoría de nuestras equivocaciones en la vida nacen de que cuando debemos pensar, sentimos, y cuando debemos sentir, pensamos. (J. Churton Collins)

- Hay una ley de vida, cruel y exacta, que afirma que uno debe crecer o, en caso contrario, pagar más por seguir siendo el mismo. (Norman Mailer)

- Si te sientas en el camino, ponte de frente a lo que aún has de andar y de espaldas a lo ya andado. (Proverbio chino)

- Consulta el ojo de tu enemigo, porque es el primero que ve tus defectos. (Antístenes)

- La tontería es infinitamente más fascinante que la inteligencia. La inteligencia tiene límites, la tonterías no. (Claude Chabrol)

- Si tu mal tiene remedio, ¿por qué te afliges? Y si tu mal no tiene remedio ¿por qué te afliges? (Proverbio inglés)

- El juego de ponerse límites a sí mismo es uno de los placeres secretos de la vida. (G.K. Chesterton)

- El que quiera ser el centro de una reunión, mejor que no acuda. (Audrey Hepburn)

- Recordad que la naturaleza nos ha dado dos oídos y una sola boca, para enseñarnos que vale más oír que hablar. (Zenón)

- En la vida humana sólo unos pocos sueños se cumplen; la mayoría se roncan. (E. Jardiel Poncela)

- La luna y el amor, cuando no crecen, disminuyen. (Proverbio portugués)

- En tu lucha contra el resto del mundo te aconsejo que te pongas del lado del resto del mundo. (Franz Kafka)

- Hay almas que uno tiene ganas de asomarse a ellas, como a una ventana llena de sol. (Federico García Lorca)

- Por un clavo se pierde una herradura; por una herradura un caballo; por un caballo, un jinete; por un jinete, un reino. (Proverbio)

- Si lo oigo, lo olvido; si lo veo, lo recuerdo; si lo hago, lo sé. (Proverbio chino)

- Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien/ cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío. (Luis Cernuda)

- La mitad del mundo no comprende los placeres de la otra mitad. (Jane Austen)

- No digas a nadie "me han contado una cosa fea de ti" sin decirle la cosa. Le recordarías demasiadas. (León Daudí)

- Una corona es tan sólo un sombrero que deja pasar la lluvia. (Federico II de Prusia)

- Las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres, pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias. (Miguel de Cervantes)

- El corazón del jinete tiene que salvar el obstáculo antes que el caballo. (Emilio González López)

- La ciencia nos ha hecho dioses antes de que mereciéramos ser hombres. (Jean Rostand)

- Que hablen de uno es espantoso. Pero hay algo peor: que no hablen. (Oscar Wilde)

- Lo que pasa por ser intuición femenina, suele ser sólo transparencia masculina. (George Jean Nathan)

- En la pelea se conoce al soldado; sólo en la victoria se conoce al caballero. (Jacinto Benavente)

- Una vez terminado el juego, el rey y el peón vuelven a la misma caja. (Proverbio italiano)

- El estúpido ni perdona ni olvida, el ingenuo perdona y olvida; y el inteligente perdona pero no olvida. (Thomas Szasz)

- Que la importancia esté en tu mirada, no en la cosa mirada. (André Guide)

- Si miras por mucho tiempo un abismo, el abismo también mira dentro de ti. (Friedich W. Nietszche)

- Cuanto más vacío está un corazón, tanto más pesa. (Mme. Amiel- Lapeyre)

-En la guerra, como en el amor, para llegar al final hay que verse de cerca. (Napoleón Bonaparte)

-El ordenador es la evolución lógica del hombre: inteligencia sin moral. (John Osborne)

-La sonrisa cuesta menos que la electricidad y da más luz. (Proverbio escocés)

-De las cosas que tienes, escoge las mejores y después medita cuán afanosamente las hubieras buscado si no las tuvieras. (Marco Aurelio)

-No debemos sujetar nuestra nave con un ancla sola ni nuestra vida con una sola esperanza. (Espicteto)